A través de un comunicado el comité de organización analiza las medidas ante al contingencia por covid-19
El 2020 promete ser para la Feria internacional del Libro de Guadalajara (FIL) un año inolvidable en más de un sentido. Por una parte, será por siempre aquel en el que el esfuerzo de autores, editores, libreros, organizadores y universitarios, fue reconocido con el Premio Princesa de Asturias, uno de los más prestigiados del mundo. Pero, por otra, será también el año de la pandemia, aquel en el que hemos visto enfermar e incluso morir a seres queridos, aquel en el que la economía mundial entró en una crisis sin precedente –al menos desde la Gran Depresión–, aquel en el que se ha aprendido a vivir, sobrevivir y crecer de acuerdo a paradigmas novísimos, que se están comprendiendo y que transformarán definitivamente el mundo entero.
Estas circunstancias llevan a hacer del conocimiento público los siguientes criterios con respecto a nuestra edición 34:
1. La Feria Internacional del Libro de Guadalajara es una iniciativa de la Universidad de Guadalajara (UdeG), institución educativa que ha liderado, junto con el Gobierno de Jalisco, la respuesta ante la pandemia en el estado. La Universidad incidió de manera importante en la disposición gubernamental de que el periodo de confinamiento y el cierre de actividades comenzaran en Jalisco la segunda semana de marzo (mucho antes que en el ámbito federal) y decidió posponer, con mucho pesar, otra de las grandes citas culturales del año, el Festival Internacional de Cine en Guadalajara, también iniciativa de la Universidad, en un momento en el que, en otras partes del país, seguían en pie algunos eventos masivos.
2. Desde que comenzó el confinamiento, el Comité Organizador de la FIL Guadalajara se ha reunido periódicamente con los especialistas epidemiólogos de esta Casa de Estudio para perfilar los distintos escenarios para nuestra Feria, que este año está programada del 28 de noviembre al 6 de diciembre. Asimismo, hemos estado en contacto estrecho con representantes e integrantes de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM) para entender el ánimo del sector y trabajar en consecuencia.
3. La realización de la Feria, en sus fechas programadas, es uno de los escenarios posibles –el mejor– ante la pandemia. La FIL ha trabajado mano a mano con autoridades de salud, de Expo Guadalajara y representantes de la industria editorial en la definición de estrategias y protocolos que mitiguen los riesgos ante la situación sanitaria del momento. Con la información que se dispone, y más allá de la estricta observancia de las disposiciones gubernamentales en todo momento, se han trabajado en las siguientes líneas:
a) No permitir que la ocupación en Expo Guadalajara rebase, en ningún momento, el porcentaje que indiquen las autoridades en materia de salud.
b) Contemplar dos sedes: la habitual y emblemática en Expo Guadalajara y una segunda en el Centro Cultural Universitario de la UdeG, con el fin de minimizar la densidad de ocupación en Expo, cumplir con las directivas sanitarias tanto del recinto como del Gobierno de Jalisco y poder recibir a un mayor número de asistentes. En esta sede, al igual que en Expo, se respetarán los topes de ocupación que definan las autoridades.
Otro escenario es la realización de una Feria virtual, en las fechas previstas, y un tercero es posponer nuestra edición 34.
4. El rector general de la Universidad de Guadalajara (UdeG), el doctor Ricardo Villanueva Lomelí, ha dejado en claro desde que comenzó la pandemia que la postura de nuestra Casa de Estudio es colaborar con las autoridades de salud –para lo cual ha dispuesto a nuestros mayores expertos en el tema–, con la premisa de que lo más importante es preservar la seguridad de las personas. Cualquier decisión que se tome se fundamentará en ello y en el desarrollo de la pandemia.
5. Desde su fundación en 1987 la FIL ha trabajado y apoyado activamente a la industria editorial de México e Iberoamérica. Así se ha hecho desde algunos años al impulsar junto con editores mexicanos el precio único del libro y se hace ahora al informar que, a cinco meses de su posible inauguración, la realización de la Feria no es aún una decisión tomada, pero sí un escenario en el cual trabajamos, con esperanza, en el entendido –y así nos lo han manifestado muchos de los editores participantes– de que es mejor tener la FIL que no tenerla. No creemos que una cancelación unilateral de la FIL Guadalajara 34 ayude a mejorar las condiciones de la industria editorial mexicana.
6. El Comité Organizador se mantiene informado y a la expectativa respecto al desarrollo de la pandemia y continuaremos monitoreando su evolución. Si quienes llevan las riendas de la situación en nuestra Universidad y en nuestro estado nos indican en los meses siguientes que no es pertinente realizar una feria presencial, actuaremos en consecuencia e implementaremos alguno de los planes alternativos que comenzamos a diseñar desde marzo pasado, y en los cuales seguimos trabajando, tal como hemos informado de manera puntual a todos los expositores y editores, en un ánimo firme de proteger a visitantes, invitados, expositores y participantes.
7. El Comité Organizador de FIL Guadalajara sigue trabajando para ser una plataforma de fomento a la lectura y para el desarrollo de la industria editorial nacional de México e Iberoamérica.
En el siguiente enlace se puede revisar la presentación de la sede Centro Cultural Universitario de la FIL Guadalajara.